Thursday, January 27, 2011

Luis Jaime Cisneros In Memóriam

No puedo jactarme de expresar que fue mi profesor, aunque cuánto me hubiera gustado. Sólo lo conocí por medio de sus escritos, que es una forma de conocer a las personas.

En su columna dominical en el diario La República, el tema de la educación era analizado desde distintos ángulos. Era una obsesión justificada como maestro. Sabía muy bien que gracias al periodismo podía hacer docencia hacia una mayor cantidad de personas que con la sola actividad dentro de aulas. De allí que aceptó los retos de dirigir en los años setenta La Prensa, y, en la década del ochenta, El Observador. Bajo su dirección ambos periódicos tenían importante espacio para la cultura. Suplementos con información de primer nivel, algo que se deja extrañar en la prensa actual. Gracias a esos suplementos, como muchos, amplíe mis horizontes literarios y cinéfilos, comenzando a frecuentar autores que desconocía.

La política, entendida como acción directa sobre la cosa pública, tampoco le fue ajena. No fue un intelectual encerrado en su gabinete o disertando sobre el siglo de oro español distante de lo que ocurre en la calle. Todo lo contrario. Al decir de Sartre, fue un intelectual comprometido con su tiempo.

No optó por el camino bullicioso y febril del revolucionario marxista, tan en boga en aquellos años. Su temperamento más se inclinaba por el camino gris, discreto y hasta anodino de la democracia. Tanto en la época de Odría, dirigiendo un periódico llamado precisamente así, Democracia, como lo refiere el propio Mario Vargas Llosa, sino también participando en la formación de los partidos políticos urbanos modernos que nacían en la década del cincuenta, tras el fin del ochenio. La Democracia Cristina puede dar fe de su actividad. No se puede soslayar tampoco su participación en Transparencia, cuando luchábamos por recuperar los valores democráticos en los turbios noventas.

Pero esta actividad política siempre la ejerció manteniendo un perfil bajo y retirándose discretamente cuando sentía que ya no era útil, volviendo a sus afanes educativos, a su tema de siempre como maestro, a modelar mentes. No a convertirlas “a su imagen y semejanza” como perpetran algunos profesores, sino a que el propio alumno extraiga de si la respuesta a su duda. Esa es la tarea del verdadero maestro. No tanto dar respuestas seguras a todo, sino apenas señalar el rumbo y que el interrogado elija el camino que mejor le parece. Algo de eso intento hacer en mis clases, aunque no exento de poca frustración y sinsabores, ahora que me ha tocado estar al otro lado del pupitre.

Aunque, mirado desde cierto punto de vista, nunca dejó de hacer política. Como decía el maestro, siguiendo a los griegos, el principal objeto de la política es la educación. Así, su amor de pedagogo fue una forma de participar en los asuntos de la polis. Sus artículos dominicales eran una sincera preocupación de lo mucho que se debía hacer por la educación en el Perú. Desde la más elemental hasta la superior, que en los últimos años se ha convertido en un remedo de si misma, por la baja calidad y mediocridad en que se encuentra sumida. No hay nación que pueda progresar sin tener un pueblo educado. Se podrá tener un ingreso per cápita alto, pero sin educación de calidad no existe desarrollo sostenible. Y el maestro Luis Jaime lo sabía muy bien, de allí su sincera preocupación por el estado en que se encuentra.

Esos artículos reflejaban a una persona sencilla y humilde, como son los verdaderos grandes. Los grandes hombres no se ufanan enarbolando sus títulos como blasones sino, como dice la vieja sentencia, se colocan al final de todos. No se desesperan por estar en la primera fila para la foto o en codearse con los poderosos, sino todo lo contrario. Su labor se asemeja más a la de un monje asceta en esta “feria de vanidades” que es el mundo. Son los maestros que enseñan con el ejemplo y dejan un gran vacío cuando se van.

Con un estilo claro y profundo, escribió hasta los últimos días de su existencia. Esa aptitud de Luis Jaime me produce una sana envidia. Ojalá, cuando llegue a su honorable edad, la vida me encuentre con mis cinco sentidos bien puestos y la muerte me espere lúcido y tranquilo, conciente de haber vivido una vida de bien.

Descansa en paz Luis Jaime.
Eduardo Jiménez J.
ejjlaw@yahoo.es

Tuesday, January 18, 2011

ARGUEDAS: CIEN AÑOS

A lo largo del mes se está celebrando con justa razón la conmemoración de los cien años del nacimiento de José María Arguedas. Pero, más allá de los ánimos celebratorios, habría que preguntarse cuántos peruanos de la nueva generación leen o leyeron a Arguedas. Si conocen, por lo menos, sus cuentos o novelas más conocidos. Cuántos escolares han leído Yawar Fiesta, Agua, Los ríos profundos. Todas las sangres, El sexto o El zorro de arriba y el zorro de abajo. Estoy seguro que muy pocos.

El mejor homenaje que puede recibir un escritor es que lo lean. No tanto los críticos o la “inteligencia”, sino las mayorías, que las nuevas generaciones lo consideren “vivo”, contemporáneo a ellos. Reviso google para saber si encuentro siquiera en la red alguna versión íntegra de alguno de sus libros y los resultados son desalentadores.

Así las cosas, el homenaje por el centenario de su natalicio se reduce a un homenaje de elite, de amigos, académicos y gente ilustrada, más no del pueblo, como le hubiera gustado a Arguedas. La mejor conmemoración que pudo recibir era una edición popular de sus obras más conocidas. No se hizo. Ni por parte del estado, ni por parte de la iniciativa privada, ni por una combinación de ambos, ahora que están tan de moda las asociaciones público-privadas. Como si el Nobel a Vargas Llosa fuese suficiente distinción a las letras peruanas. (Y acá me arriesgo a una pregunta temeraria y fuera de contexto: habría que ver si las generaciones venideras leerán con la misma fruición a nuestro Nobel).

En fin, creo que el mejor homenaje personal que se le puede hacer a nuestro querido Arguedas es leer o releer sus libros. A pesar que algunos de ellos parecen describir un mundo que ya no existe, precisamente por eso; y, también, porque, como los buenos escritores, intuía que el Perú iba hacia la confluencia de lo andino con lo costeño, a la “cholificación”, a “todas las sangres”. Naturalmente no llegó a ver ese nuevo Perú, pero intuyó con agudeza hacia dónde iba, más allá de los sociólogos y antropólogos que lo maltrataron en la célebre mesa redonda de 1965. ¿Quién se acuerda de esos “sabios doctores” y de sus farragosos e indigestos discursos?

Leyéndolo es el mejor homenaje que le podemos rendir.
Eduardo Jiménez J.
ejjlaw@yahoo.es

Tuesday, January 11, 2011

“EL TÍO GEORGE”

Huelga decir que “el tío George” (Jorge del Castillo) no es santo de mi devoción; pero, el escarnio que están haciendo de él dentro y fuera del APRA revela más conflictos internos, ajustes de cuentas, fríos cálculos políticos a futuro y una falta de visión del partido más añejo del Perú.

“La cuestión de estado” lanzada por la candidata invitada puede entenderse si realmente la candidatura de del Castillo fuese un verdadero lastre para que suba en las encuestas. Por estrategia política y por cuestiones éticas se podría entender que pida su renuncia. Pero, estamos seguros que si “el tío George” renuncia a su legítima aspiración a ser candidato al Congreso, Mercedes Aráoz no va a remontar en las encuestas y seguirá estancada en su cinco por ciento, menos despegará a las estrellas colocando en reemplazo un independiente o un compañero libre “de polvo y paja”; añadiendo más bien “de yapa” la ganancia gratuita de la animadversión del propio Secretario General del partido que la acogió y le abrió las puertas (y que de paso “mueve” gran parte de la maquinaria aprista), así como del medio millón de votantes que pertenecen al “núcleo duro” que vota por el partido de Alfonso Ugarte en las buenas y en las malas, y que prefieren a un militante aprista como candidato, así esté manchado y “emputecido”, que a una seudo virginal e “impoluta” candidata que viene de fuera.

Es que la señora Aráoz no conoce al pueblo aprista. Si yo fuese un militante del APRA votaría por un congresista de mi partido pero no por ella para presidenta. Preferiría votar hasta por Humala que representa una suerte de nacionalismo muy similar al aprismo auroral. Y estoy seguro que dentro del partido de la estrella muchos militantes van a practicar el voto cruzado el día de las elecciones generales.

No se cómo va a terminar la tragicomedia de la renuncia forzada del “tío George”. Sea como fuere creo que la señora Aráoz carece de “olfato político”, se ha “comprado” un pleito gratuito y ha confundido al “dueño del circo” con el partido; porque si bien Alan García (el titiritero detrás del escenario) en corpulencia se puede parecer a Víctor Raúl Haya de la Torre, en carisma, llegada, conocimientos, sabiduría y unión del pueblo aprista dista años luz del fundador del APRA, algo que Mercedes Aráoz no parece conocer muy bien.
Eduardo Jiménez J.
ejjlaw@yahoo.es

Wednesday, January 05, 2011

FRASES CÉLEBRES DEL 2010

Para comenzar el año un poco en “plan de joda” hemos seleccionado diez frases célebres dichas, para variar, casi todas por los políticos a lo largo del año que terminó. (Selección de frases tomadas de Perú 21). Ahí van:

1. Usted es la estrella del APRA y yo el sol de Solidaridad. 11 de Octubre.
“Franelero” Luis Castañeda dirigiéndose a Mercedes Aráoz, se “alucina” mismo sol. Suave con la quemada.

2. Imagínate solos en la playa, disfrutando del sunset, Arica por ejemplo, y luego, en la noche, en un cuarto de hotel cualquiera, te aseguro que no vas a sentir frío. 30 de Octubre.
“Calentona” Martha Silva provoca al procurador público Jorge Luis Caldas a fin que formalice denuncia contra su ex, el mandamás de Petroperú, que “le sacó la vuelta” con otra. Con razón hace muchos años atrás, un hombre con mucha experiencia en la vida, me recomendó que jamás termine feo con ninguna mujer. Ese consejo le faltó al ex presidente de Petroperú.

3. Eso ya no parece una combi, parece una casa de citas y José Barba parece una madame. 16 de Mayo.
Jaime Bayly arremete contra Alex Kouri al subirse a “la puta combi” de Pepe Barba, Cambio Radical. Al final la “combi” no llegó ni al paradero inicial.

4. Me interesa un comino esta elección. Métanse la alcaldía al poto. 16 de Setiembre.
“Rayada” Lourdes Flores confiesa que “le llega” la alcaldía de Lima, como que a la larga perdería una elección considerada “papaya” por su grupo político.

5. Alan García tiene un ego colosal. 16 de Diciembre.
Ex embajador yanqui en revelación de Wikileaks de un “secreto” que treinta millones de peruanos conocemos.

6. Ese privilegio que Mario Vargas Llosa regala con su pluma y su talento al Perú al lograr el Premio Nobel de la Paz de la Literatura. 7 de Diciembre.
El “sano y sagrado” (Toledo) inventando una nueva categoría de premio Nobel luego de una probable larga sesión de whiskies clavados entre pecho y espalda.

7. Cuando cualquier tribunal o el Ministerio Público lo decida, lo haremos, pero no ha pedido de cualquier loquito de la calle. 8 de Noviembre.
Alan García “basurea” a Alejando Toledo, ante el pedido de este último que abra sus cuentas bancarias. Ya pues Toledo, no te hagas, ni que estuviesen a su nombre.

8. Solo un país de maricas permite que se insulte a la gente sin hacer nada. 13 de Octubre.
Homofóbico ex presidente de la Corte Suprema y “hombre de derecho”, Javier Villa Stein, avala la golpiza propinada al joven que le dijo “Corrupto” a Alan García. Con razón la justicia anda tan mal.

9. ¡Corrupto¡ 9 de Octubre.
Adjetivo que le increpó el joven Richard Gálvez a Alan García antes que este –previa sujeción de los brazos del muchacho por los miembros de la seguridad de AGP- le estampase un par de manazos y cayera al suelo donde lo pateó a su gusto la “escolta” del presidente.

10. No seas cojudo hombre, la plata llega sola. 6 de Diciembre.
Alan García da “sabio consejo” a un preocupado Jaime Bayly que teme el sueldo de presidente no le alcance para mantener a su familia. Jaimito, de presidente podrías tener hasta diez hijos y mantenerlos muy bien.
Eduardo Jiménez J.
ejjlaw@yahoo.es